Sector automoción
Para producir un vehículo de alta calidad, necesita un equipo de alta calidad.
Tanto si es para aplicar pintura en aerosol a los automóviles, como para su montaje con herramientas neumáticas, la industria de la automoción depende de los compresores para conseguir un acabado de alta calidad.
La presencia de contaminantes en el aire comprimido puede dar lugar a un costoso desperdicio, obligar a reprocesar el producto y perder parte de la producción.
Nuestros compresores ofrecen un rendimiento y una fiabilidad inigualables, además de ofrecer el equilibrio perfecto entre calidad de aire y bajo coste de funcionamiento.
Entre los usos habituales del aire comprimido en la industria del automóvil, se incluyen
Inflado de neumáticos
Acabado de productos
Robots neumáticos
Corte y soldadura por plasma
Herramientas neumáticas
Aplicaciones de pintura
Aire respirable
Eficiencia y calidad de nuestra red de aire comprimido.
Los compresores de aire que ofrecemos son ideales para alimentar herramientas neumáticas en los talleres de automóviles. Desde pistolas de impacto hasta herramientas de lijado, nuestra red de aire comprimido proporcionan la potencia y presión necesarias para conseguir un gran rendimiento.
Además, nuestros compresores están equipados con características de control de velocidad y presión, lo que permite a los técnicos ajustar la potencia según las necesidades específicas de cada trabajo, optimizando el consumo de aire.
Nuestro compromiso con la sostenibilidad
En Aircom nos comprometemos a reducir el impacto ambiental de nuestras operaciones y productos. Nuestros compresores de aire están diseñados para minimizar el consumo de energía y reducir las emisiones, ayudando a nuestros clientes a cumplir con sus objetivos de sostenibilidad.
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Preguntas frecuentes de nuestros clientes
En Aircom nos preocupamos por manteneros totalmente informados de todo lo relacionado con la red de aire comprimido
Un equipo a presión está definido bajo la denominación de cualquier aparato que pueda contener y almacenar fluidos a una presión por encima de 0,5 bar. Dentro de estas categorías podemos incluir desde los compresores, recipientes a presión simples, cualquier equipo a presión que sea transportable, tuberías, depósitos para acumulación de fluidos y en líneas generales cualquier esquipo a presión. Estos equipos a presión generalmente están prestando sus servicios en talleres metalmecánicos y en general en cualquier actividad donde se precise la utilización de fluidos a presión, son muy habituales en los talleres de manufactura, pintura y en los talleres de reparación de neumáticos.
- EIP-1: Para instalaciones que no requieran proyecto de instalación
- EIP-2: Para instalaciones que requieran proyecto, también las que no requieran.
- Certificado de homologación/registro de cada uno de los equipos.
- Instrucciones de cada uno de los equipos.
- Certificado de conformidad de la producción del equipo.
- Actas de prueba emitidas por el constructor de los equipos.
- Certificado de puesta en marcha, emitido por el instalador.
- La presión de diseño y presión máxima de servicio.
- El número de registro del equipo.
- La fecha de la primera prueba del equipo.
- Si se supera la marca tope de 25.000 en la suma total de la presión máxima de servicio de todos los equipos de forman parte activa de la instalación en bar por el volumen en litros.
- Si esta presión pudiera elevarse por aumentos de temperaturas extremos o por la acción de una llama o cualquier aporte de calor que provoque sobre calentamiento y la suma total de los productos de presión máxima de servicio bar por el volumen de litros de cada uno de los equipos sea superior a 10.000 dentro de una misma instalación.
- Si estas instalaciones y equipos contienen fluidos peligrosos en cantidades superiores a las que especifica y permite la normativa vigente.
- Tamaño y envergadura del proyecto.
- Costos asociados a gestoría.